Coleccionar es una pasión que no tiene un estatus sexual, racial y social. Se le da tanto a simples mortales como a famosos. Por ejemplo, Elizabeth Taylor, hasta su muerte, coleccionó joyas. Arnold Schwarzenegger - coches "Hummer", su actor más de 80 unidades.
Bill Gates colecciona libros raros. En su colección hay incluso un diario escrito a mano del propio Leonardo da Vinci, que le costó a su propietario $ 30 millones.
Los cantantes Elton John y Grigory Leps acumulan puntos con entusiasmo. La actriz Demi Moore recoge muñecas, tiene más de 200 piezas. La pasión de Victoria Beckham: bolsos, ya los compró por $ 3 millones.
Heidi Klum y Madonna recogen zapatos, y la leona de la sociedad doméstica Lena Lenina - abrigos de pieles muy caras: marta, sable, visón.
Sin embargo, si tales pasatiempos son claros para la mayoría, entonces hay personas cuyas colecciones pueden llamarse más que extrañas. Por ejemplo, la top model Claudia Schiffer recoge insectos muertos.